botella agua

Si la concentración de sodio en sangre desciende demasiado entramos en hiponatremia. Reponer líquidos pero no minerales nos puede llevar rápidamente a ese estado.

 

El agua es una sustancia extraordinaria. Sabemos que en los seres vivos juega un rol único, pues no hay organismo vivo cuya estructura y función no se encuentren en extrema dependencia con este constituyente. Cuando buscamos vida en otros planetas lo primero que buscamos es agua, pues como decía el Premio Nobel de fisiología y medicina Albert Szent-Gyorgy, “no hay vida sin agua”. Es el disolvente de base y, por lo tanto, es necesaria a la hora de transportar nutrientes, como minerales, vitaminas y otras sustancias hidrosolubles. Es en ella que se producen prácticamente todas las reacciones químicas. Además, es la vía principal de transporte para el intercambio entre el organismo y su entorno. Las sustancias corporales se encuentran disueltas en el agua: sangre, secreciones, orina, heces, linfa, etc. Asimismo, tiene un papel termorregulador y permite mantener el equilibrio térmico de nuestro organismo, en definitiva, no podemos prescindir de ella.

En los humanos representa el 60% del peso corporal total en un adulto normal. Este agua en forma líquida se encuentra distribuida en dos compartimentos principales, uno intracelular y otro extracelular. A su vez, el líquido extracelular se puede dividir, según su situación, en líquido intravascular o plasma sanguíneo y en líquido intersticial, ese medio interno que se encuentra bañando la matriz extracelular y por lo tanto a las células y tejidos. La homeostasis de este medio interno es fundamental ya que, como se ha señalado anteriormente, sirve como vía de circulación para los diferentes nutrientes que requieren las células para poder realizar su actividad.

La constancia en su volumen, composición y pH es esencial, pues cualquier diferencia con respecto a los niveles normales de estos parámetros se suele traducir en problemas de orden clínico. En lo que a su composición se refiere, este líquido extracelular tiene unos componentes prácticamente idénticos a los de Totum Sport, pues es rico en sodio, cloruro, magnesio, iones bicarbonato y otros macro y microelementos.

Sin embargo, mantener los niveles de sodio en sus niveles idóneos no siempre es fácil y aunque los riñones se ocupen de regular el exceso o el defecto, muchas veces no consigue hacer frente a estos desequilibrios, lo que se traduce en la aparición de trastornos como la hiponatremia.

Este trastorno electrolítico se caracteriza por una concentración de sodio en plasma por debajo de 130 milimoles por litro. Estos niveles bajos de sodio en sangre pueden aparecer por diferentes motivos. En el deportista es frecuente que se produzca por una ingesta demasiado elevada de agua, pues ésta diluye el sodio contenido en los líquidos orgánicos y disminuye su concentración pudiendo producir náuseas, desorientación e incluso edema cerebral. Las autoridades recomiendan tener mucho cuidado a la hora de hidratarse. Debemos recordar que una hidratación correcta no consiste exclusivamente en una reposición hídrica, sino también mineral. Tomando agua y Totum Sport el balance hidromineral está asegurado.

 

Bibliografía

Horton, R., Moran, L., Scrimgeour, G., Perry, M., & Rawn, D. (2008). Principios de Bioquímica. México: Pearson Educación.

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